Los términos "huracán" y "tifón" son nombres específicos en una región para un "ciclón tropical" fuerte. Un ciclón tropical es el término genérico para un sistema de presión baja sobre aguas tropicales. Los ciclones tropicales con vientos máximos sostenidos en la superficie menor de 17 m/s (34 kt ó 39 mph) son llamados "depresiones tropicales".

Una vez los ciclones tropicales alcanzan vientos de por lo menos 17 m/s (34 kt ó 39 mph), estos son llamados típicamente una "tormenta tropical" y se les asigna un nombre. Si los vientos alcanzan los 33 m/s (64 kt ó 74 mph), entonces son llamados: un "huracán" (en el Océano Atlántico del Norte, en el Océano Pacífico del Noreste, al este de la línea meridional; o en el Océano Pacífico del Sur, al este de 160E); un "tifón" (en el Océano Pacífico del Noroeste, al oeste de la línea meridional); un "ciclón tropical severo" (en el Océano Pacífico del Sudoeste, al oeste de 160E, o en el Océano Índico del Sudeste, al este de 90E); una " tormenta ciclónica severa " (en el Océano Índico del Norte); y un "ciclón tropical" (el Océano Índico del Sudoeste).

La definición de "vientos máximos sostenidos en la superficie" depende de quien tome las medidas. Las normas de la Organización Mundial de Meteorología sugieren utilizar el promedio de 10 minutos para obtener una medida sostenida. La mayoría de los países utilizan esto como el estándar. Sin embargo, el Centro Nacional de Huracanes (NHC) y el Centro Conjunto de Alerta de Tifones (JTWC) de EE.UU. usan el promedio de 1 un minuto para obtener los vientos sostenidos. Esta diferencia puede traer complicaciones al comparar la estadística de una cuenca a otra, pues al usar un período promedio menor puede elevar levemente el número de incidencias.

Las tormentas tropicales son fenómenos meteorológicos de una violencia extremada que se forman en el océano Océano Atlántico, el Océano Índico y el Océano Pacífico, y afectan a ciertas regiones de los trópicos lluviosos. Se forman durante los meses más calurosos del año en las zonas de calmas ecuatoriales cercanas al ecuador. El aire cálido y húmedo se eleva, se enfría y se condensa formando nubes tormentosas con fortísimas corrientes de aire en su interior. A medida que los vientos se hacen más fuertes, comienzan a arremolinarse alrededor de un centro de bajas presiones llamado el "ojo de la tormenta" y debido a la presencia de corrientes descendentes en el centro de la perturbación.

Los tifones y huracanes giran en dirección contraria a las agujas del reloj en el hemisferio norte y en dirección a las agujas del reloj en el hemisferio sur como resultado de la rotación terrestre. Desde el borde de la tormenta hasta su centro, la presión atmosférica desciende y la velocidad del viento aumenta.